Una solución perfecta

Pocoyó y sus amigos corren sin parar y Pato no puede alcanzarlos. Pato cree que ya es grande como para jugar con los chicos y con unos lentes de sol se siente muy adulto y decide llamarse Señor Gran Pato. Al final todos vuelven a ser niños.

Pato no ha visto a Pocoyó, mientras camina se encuentra con el pie de Pocoyó y como no pueden adivinar qué es, Pato muere de risa. Pocoyó y Pato continúan jugando adivina, adivinanza junto a Elly, oruga y pájaro bebé.

Pocoyó busca a sus amigos para jugar, pero un extraño ruido llama su atención y en las nubes pájaro bebé juega sin parar. Pájaro bebé quiere jugar con Pocoyó pero no puede volar lo cual lo pone triste pero Pulpo lo ayuda y juntos juegan sin parar.

Pocoyó encuentra un extraño cubo de color rojo. Pocoyó se desespera al no poder atrapar al cubo. Pato y Pocoyó se asombran cuando se dan cuenta que Tori Dori habla. Pocoyó encuentra nuevas formas de jugar con Tori Dori y sus amigos.

Pocoyó juega con pájaro bebé y Pato, pero deben tener cuidado para que no se lastimen. De repente, Pato está patas arriba y no saben cómo sucedió. Elly trata de ayudar a Pato pero todo se complica.